Los compresores de canal lateral pueden ser de una o dos etapas, dependiendo de la cantidad de compresión del aire, lo que permite adaptarse a las necesidades específicas de cada aplicación. Funcionan en seco y sin contacto, lo que elimina la necesidad de mantenimiento frecuente. Son ideales para aplicaciones que requieren un caudal volumétrico de entrada inferior a 2.500 m³/h y un diferencial de presión de hasta 780 mbar. Gracias a sus excelentes prestaciones, costes de mantenimiento prácticamente nulos y una baja inversión inicial, se han consolidado como la opción número uno del mercado.